Creo que sí hoy me pidieran un consejo para la vida sin lugar a duda sería “quierete a ti mismo, tanto que no dudes ni un segundo que tú eres tu prioridad y todo lo que sea para hacerte bien lo recibes con los brazos abiertos y todo lo que te genere ruido lo rechazas, sin importar más”. Sé que en palabras suena para muchos obvio y para otros rídículo, y entiendo ambos puntos; claro está, ambos seguramente vienen de la forma en que estamos programados, algunos porque así venimos desde nuestra educación de niños y otros porque decidimos tomar acción en el camino sobre aquello que sentíamos que ya…
El mundo lo mueven dos fuerzas: el amor y el miedo. Te invito a que caminemos juntos por el amor.
