Crecimiento personal

Aquí y ahora

El título lo dice todo, pero vamos a desglosarlo, porque en palabras suena muy bonito, sin emabrgo en acciones es mucho más complejo, vivir aquí y ahora es todo un arte.

No sé desde cuándo, pero suponemos que desde hace miles y millones de años el ser humano se acostumbró a vivir en el pasado o en el futuro, descartó el presente. Básicamente lo que hizo fue convertir este momento en un espacio para pensar en lo que ya había pasado o lo que estaba próximo a pasar. Nunca en lo que le estaba pasando, entonces estaban de cuerpo, pero rara vez de mente.

Desde que nacemos nos enseñan a vivir así: desconectados, pensando en que pasará más tarde, mañana, en una semana, inclusive en algunos años. Pasamos la vida preocupándonos por algo que ni siquiera sabemos si pasará o cómo pasará. Nos acostumbraron tanto a eso que vivimos trabajando por metas a corto, mediano y largo plazo. Pero conozco muy pocas personas que trabajan por disfrutar el momento, la acción, el presente.

A medida que vamos creciendo no solo pensamos en lo que vendrá, sino en lo qué pasó, en qué hubiese pasado si…, recordando y rebobinando cosas que ya fueron y que tampoco hacen parte del presente.

Es así como nos pasamos casi toda la vida en alguna de las dos situaciones o en las dos y no disfrutamos lo que realmente nos pasa, nuestra realidad. Nos desviamos tanto que rendimos menos, sin darnos cuenta, estamos en todos lados menos donde tenemos que estar, irrespetamos nuestro tiempo y el del otro, rara vez sentimos placer con una actividad tan sencilla como caminar o respirar. Lo hacemos tan automático, que no somos conscientes, ese es el mayor problema que decidimos dejar de ser conscientes y entramos en negación de nuestras propias acciones.

Esta lección me costó porque es difícil darse cuenta de que la vida real es lo que pasa mientras tú estás disperso y concentrado en otras cosas. Pero cuando la aprendí, cambiaron muchos comportamientos. Uno de los ejemplos más sencillos, es que ahora soy de las que se logra desconectar del celular completamente y que, procuro, cuando estoy en mis espacios o con alguien más esta herramienta no esté fuera del bolso. Se preguntarán ¿por qué? La respuesta es simple ahí estoy creando y “viviendo” una realidad diferente a lo que realmente me esta sucediendo en el ahora, por eso decidí apartarlo y disfrutar.

Aquí y ahora
Foto tomada de google

Hoy te invitamos a que vuelvas de donde estés, el pasado o el futuro. Te invitamos a que no te lamentes y tampoco te anticipes.

Se más consciente de tus sentimientos y sensaciones, deja que todos tus sentidos estén activos y te manden información, así valorarás cada momento y hasta respirar será todo un placer.

Está bien planificar, porque vivimos en un mundo así, entonces hay cosas que no podemos dejarlas al azar, tenemos que aprender a equilibrar lo que somos en esencia con el mundo con el que vivimos, solo así lograremos hacer cambios. Entonces, lo importante es que disfrutes el proceso, así sea un plan de acción, disfruta cada paso, se consciente de cada segundo.

Entiende tus emociones y disfrútalas, sea baja o alta disfrútala, algo te está aportando, aprender a disfrutar cada una de tus emociones te permite crecer, estar más presente y sobre todo aprender de lo que sucede sin quedarse ahí eternamente.

Esto sonará raro, pero aprende a no hacer nada, sentarte o acostarte y dejar que todo fluya sin que hagas una actividad específica, ni albergues un montón de pensamientos innecesarios. Esta tarea es compleja, muy compleja, pero después de que la aprendas será de tus actividades favoritas, te lo aseguro.

Vivir en el presente hace que vivas calmado, tranquilo y no de apariencia, sino en serio, se nota en la forma en que caminas, en tu mirada, en tus movimientos, tus acciones, vivir aquí y ahora te lleva a un lugar de plenitud.

El regalo más lindo que te puedes dar es vivir aquí y ahora, y desde ahí comenzarás a dárselo a los demás, comenzarás a manejar el tan famoso y poco visto “tiempo de calidad”, te conectarás con la vida, con su fluir, con las oportunidades, las emociones. Entenderás que la mayoría de las cosas por no decir que todas son efímeras, que sueles desgastarte en algo que más tarde ya no existe más que en tu recuerdo.

Valoremos más el tiempo, abandonemos los pensamientos repetitivos, las preocupaciones, las suposiciones. Dejemos de cargar cosas que ya no nos pertenecen.
Vive en este instante, espero tu corazón entienda este mensaje.

One Comment

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.